Cuidado de Nepenthes
CULTIVO DE NEPENTHES:
Algunas especies de tierras bajas son fáciles de cultivar, mientras que otras son bastante difíciles, sobre todo las especies montañosas.
Las más robustas son los híbridos de tierras bajas (Nepenthes x ventrata = Nepenthes ventricosa x Nepenthes alata ), Nepenthes alata y Nepenthes gracilis.
El principal problema de cultivo es la alta humedad exigida por todas las especies y el tamaño que pueden alcanzar.
Estas especies se suelen encontrar en floristerías o viveros como plantas colgantes decorativas, aunque se pueden plantar en terrarios o macetas como las demás plantas carnívoras.

-Luz:
No soportan el sol directo, debe de ser difuminada.
Si no dispone de luz suficiente, los péndulos perderán su color.
Esto se puede lograr con filtros solares como laminas onduladas de PVC o placas de policarbonato, o simplemente también con luz artificial de color blanco con una exposición de una 16 horas.
El sol directo puede quemar los jarros y a veces hasta las hojas.
-Temperaturas:
Según la altura a la que vivan en la Naturaleza, Nepenthes tolera temperaturas variables.
Para las especies de tierras bajas, temperaturas constantes entre 20 y 30ºC durante todo el año.
Para las especies montañosas, temperatura alrededor de 25ºC de día y por debajo de 15ºC de noche.
Las especies montañosas son sensibles al calor excesivo.
Algunas Nepenthes aceptan mínimas de 8 a 10ºC, al igual que las formas híbridas comúnmente expuestas en el mercado.
En el caso de las especies más tropicales, la mínima nocturna debe ser de 15ºC.
Durante el día, la temperatura no debe descender de los 21ºC, y de los 24 o 25ºC en invernadero.
Nepenthes no conoce un auténtico período de reposo.
-Humedad:
La humedad ambiental tiene que ser muy elevada.
Imprescindible una humedad constante por encima de 70%, por lo que se aconseja el cultivo en terrarios o invernaderos.
Si no se mantiene esta cantidad de humedad los jarros en las Nepenthes no se producirán del todo bien.
Vaporice con mucha regularidad los hojas en función de la temperatura ambiente.
Pulverice la tierra cada 3 ó 4 días, moje el suelo a su alrededor y coloque en sus proximidades un cuenco grande con agua.
-Substrato:
Necesitan de un sustrato bien aireado y con pH alrededor de 6.
Un ejemplo seria fibras de esfagnos con una mezcla de materiales gruesos como corteza de pino.
Otra receta es la formada por fibras de esfagnos, turba de esfagnos, perlita, piedra pómez, roca volcánica, vermiculita, corteza fina de pino y carbón a partes iguales.
Otra es una parte de turba de esfagnos, una parte de corteza fina, una parte de perlita y otra de vermiculita.
Sustrato compuesto de 40 % de turba rubia, 40 % de perlita y 20 % de vermiculita o de poliestireno expandido (corcho blanco).
Los contenedores siempre deben tener agujeros.
-Riego:
Mantendremos el sustrato siempre húmedo.
Esta carnívora no deberá ser regada solo por arriba y el sustrato nunca deberá estar empapado, si no se pudrirá con mucha facilidad.
Regar por pulverización. No encharcar.
El método de estancamiento no es muy adecuado para estas plantas, o sólo si es muy moderado.
Lo ideal es regar por nebulización cada cierto tiempo.
También se puede tener debajo un recipiente con agua que al evaporarse humedezca las hojas y el sustrato.
Debe evitar que el agua se estanque en el platillo.
Deje que el sustrato se seque ligeramente en invierno si la temperatura de la habitación es inferior a 16ºC.
Regar exclusivamente con agua libre de cal. Utilizar agua de lluvia o en su defecto un agua muy poco mineralizada, de pH < 7 (se encuentra en el comercio); jamás agua caliza.
Cuide de que la temperatura del agua sea al menos equivalente a la de la habitación.
-Abono:
No es preciso abonarla. La planta satisface sus necesidades de nitrógeno gracias a los insectos que captura.
-Trasplante:
Cada 2 años, en primavera, preferentemente a macetas de barro bastante hondas.
Dejar en remojo las macetas nuevas durante 24 horas en agua antes de usarlas para que se empapen de humedad, de manera que después proporcionen un entorno más húmedo a la planta.
-Plagas:
Pulgones y cochinillas viven como parásitos de las plantas que padecen sequía o están debilitadas por abonos demasiado ricos en nitrógeno.
Tolera mal los insecticidas comerciales, por lo que es mucho mejor eliminar las primeros cochinillas frotando las hojas con un algodón empapado en jabón de Marsella.
-Multiplicación:
- Por semillas:
Plantar las semillas en sustrato húmedo, alta humedad ambiental, luz brillante y temperatura de 21 a 29ºC en el caso de las Nepenthes de tierras bajas, y de 10 a 21ºC en el caso de las de montaña.
Germinarán al cabo de unas 6 semanas.
Cuando poseen 2 ó 3 hojas se podrán trasplantar a una maceta mayor.
- Por esquejes de tallo:
En primavera, en atmósfera controlada, en caliente (25 a 27ºC).
Cortamos un esqueje de la parte superior del tallo.
Al cabo de unos días, en el nodo superior del tallo del que sacamos el esqueje, se abra formado otra yema, por lo que cortaremos de nuevo este esqueje, siempre con 2 o 3 nodos y procederemos igual que con el anterior.
- Por esquejes de hoja:
En los esquejes de hoja, cortar la hoja por la mitad para reducir la pérdida de humedad y plantar sólo la parte final de la hoja.
- Por acodo aéreo:
Acodar tallos largos de Nepenthes trepadoras, en verano.
Una pequeño dosis de hormonas de enraizamiento y una elevado humedad del sustrato y en la atmósfera permiten la obtención rápida de raíces.
El un punto elegido del tallo, realizamos con mucho cuidado un ligero corte circular alrededor de este.
Medio centímetro mas abajo repetimos la operación y después retiramos cuidadosamente la corteza entre los dos cortes.
Aplicamos fungicida y hormonas de enraizamiento en el corte y lo rodeamos de fibras de esfagnos empapadas.
Después rodeamos la fibra con plástico transparente, y nos aseguramos de que no le falte humedad.
En dos o tres meses el acodo habrá generado raíces y podremos separarlo de la planta madre.
Siempre deberemos tratar los cortes con fungicida.
-Cuéntanos tu experiencia: